La escultura en el Renacimiento, tanto en el Quattrocento como en el Cinquecento, tomó como base y modelo las obras de la antigüedad clásica y su mitología, con una nueva visión del pensamiento humanista y de la función de la escultura en el arte. Como en la escultura griega, se buscó la representación naturalista del cuerpo humano desnudo con una técnica muy perfeccionada, gracias al estudio meticuloso de la anatomía humana. En Italia convivieron por igual los temas profanos con los religiosos; no así en otros países como España y Alemania, donde prevaleció el tema religioso.El cuerpo humano representó la Belleza absoluta, cuya correspondencia matemática entre las partes se encontraba bien definida, y el contrapposto fue utilizado constantemente desde Donatello a Miguel Ángel. En esta época es cuando se dio prácticamente la liberación de la escultura del marco arquitectónico, los relieves se realizaron con las reglas de la perspectiva y se mostraban a los personajes con expresiones de dramatismo que llevaban a la sensación de gran terribilità en los sentimientos expuestos en las esculturas de Miguel Ángel, como en el rostro de su David.
Un papel fundamental fue la figura de los mecenas, representados por la iglesia y personajes de la nobleza que obtenían con su mecenazgo prestigio social y propaganda política, y abarcó todos los temas: religiosos, mitológicos, de vida cotidiana, retratos de personajes, etc.
Reapareció con el Renacimiento la glíptica greco-romana, que se había olvidado casi por completo durante la Edad Media en la labra de piedra finas (salvo algunas muestras de arte bizantino), y desde el siglo XVI se labraron preciosos camafeos de gusto clásico, tan perfectos que, a veces, llegan a confundirse con los antiguos. No obstante, apenas sí alcanzó a restablecerse el uso de los entalles de piedra fina, tan predilectos de las civilizaciones griega y romana. Estos pequeños relieves sirvieron como modelo, una vez agrandados, para la decoración por parte de escultores en grandes medallones para palacios de Italia y Francia.
La escultura del Renacimiento se sirvió de toda clase de materiales, principalmente del mármol, bronce, madera y terracota.
El Cinquecento o pleno Renacimiento se desarrolló a lo largo del siglo XVI con características diferenciadas en cada una de las dos mitades del siglo, dominando el clasicismo en la primera y el manierismo en la segunda. Supuso el triunfo de las experiencias del Quattrocento. Una de sus características principales es el gusto por la grandiosidad monumental, teniendo siempre presente el hallazgo del Laocoonte y sus hijos clásico, descubierto en 1506. Mientras los artistas del Quattrocento crearon escuela en Florencia, los artistas del Cinquecento crearon sus obras y desarrollaron su arte principalmente en la ciudad de Roma, que pasó a ser el centro artístico del nuevo siglo. Florencia se mantuvo como ciudad renacentista importante, y se siguieron haciendo obras maestras de arte en la capital toscana durante este período, como el David, los sepulcros de las Capillas de los Médici, el Perseo de Cellini, etc. El artista representativo de este periodo es Miguel Ángel, personaje de gran fuerza y personalidad.
Miguel Ángel Buonarroti, discípulo también de la escuela florentina, resume en su persona casi todo el arte escultórico de su época en Italia (años 1475-1564). En los primeros treinta años de su vida conservó su cincel algunas tradiciones del siglo XV produciendo obras moderadas y bellas aunque vigorosas. A esta primera época se deben sus ponderadas esculturas de la Madonna de Brujas y la Piedad con algunos Bacos y Cupidos y el David de Florencia. Pero desde el año en que los papas comenzaron a encargarle la construcción de grandiosos monumentos, creó un estilo gigantesco, vigorosísimo, lleno de pasión, independiente y llamado de terribilità excepcionalmente suyo. De este género son las esculturas de los sepulcros de los Médici en la capilla de éstos en Florencia (de Julián y su hermano Lorenzo, cuya estatua sedente se conoce con el nombre de Il Pensieroso por su actitud pensativa) y las estatuas que preparaba el artista para el sepulcro del Papa Julio II sobre todo el famoso Moisés que halla en la basílica de San Pietro in Vincoli.
Sansovino (su nombre propio es Andrea Contucci) fue un artista educado entre los artistas florentinos que se manifiesta en sus esculturas amante de la forma exterior, de la anatomía y del clasicismo, sobre todo en las estatuas que decoran los mausoleos del cardenal Ascanio Sforza y del obispo Basso Rovere en la iglesia de Santa María del Popolo, aparte de otras en Florencia y Venecia. Su discípulo Jacobo Sansovino trabajó principalmente en Venecia, siendo el gran difusor de la obra de Miguel Ángel. Una de sus mejores obras escultóricas es el Baco.
Benvenuto Cellini fue, además de escultor, un gran orfebre. Su obra monumental en bronce de Perseo con la cabeza de Medusa fue un símbolo del triunfo de la familia Medici sobre la República florentina. Es el autor del Cristo de mármol del monasterio de El Escorial.
Manierismo
El término manierismo se refiere a un estilo de características propias dentro del Renacimiento. Se dio a lo largo de siglo XVI, especialmente a partir de 1520.La característica que mejor lo define es la constante búsqueda de lo no convencional junto con la destrucción de un equilibrio lógico aplicando líneas o posturas deformantes, algo que a primera vista puede ser desconcertante para el espectador. Es el rechazo del equilibrio adoptando posturas forzadas.
En el manierismo la escultura rehusó el clasicismo buscando formas curvilíneas y dinámicas, la llamada serpentinata o composición de curva y contra curva en que los cuerpos giraban en sí mismos, en espacios estrechos y a veces con escorzos muy pronunciados.
En Italia, la escultura manierista está representada por Juan de Bolonia, Benvenuto Cellini y Miguel Ángel, uno de cuyos mejores ejemplos es la Piedad florentina donde el Cristo se muestra con postura serpentinata.
Se difundió este estilo por Europa gracias a la extensa colección de grabados, y sobre todo en el terreno escultórico en la profusión de pequeños bronces venidos de Italia. Así se desarrolló en las cortes europeas de Francisco I en Fontainebleau con Francesco Primaticcio, que fue el encargado de traer copias de antigüedades desde Roma.También se desarrolló en la corte de Rodolfo II en Praga, y de Felipe II en El Escorial, donde la corrección académica caracterizó el estilo del manierismo empleado por los Leoni.Influenciado por Miguel Ángel, Gaspar Becerra impuso su estilo manierista en el retablo de la catedral de Astorga, y es en Valladolid, donde se encontraba además de Becerra Juan de Juni, donde se realizó más escultura de este tipo clásico-heróico.
No hay comentarios:
Publicar un comentario